25 Jun Entrevista a Vicky López

Este mes de junio, con el final de curso, hemos querido hablar con una de nuestras profesoras más entrañables: Vicky López. Sus inconfundibles dibujos todavía decoran salitas del colegio. Hablamos con ella de su paso por Guadalaviar, de su experiencia como profesora y hacemos un recorrido lleno de recuerdos de su mano.

1. ¿En qué año y cómo empezaste a dar clase en Guadalaviar?

Empecé a trabajar en el colegio en el año 1964. Yo había terminado Magisterio y estaba preparando oposiciones cuando una vecina, Charo Serrano, agregada del Opus Dei, me dijo: Vicky, tú has terminado ya, ¿verdad?

Al decir que sí, me preguntó si querría hacer una sustitución. Ilusionada por ganar un dinerillo, acudí al colegio a hablar con la directora, en ese momento Lolita Sainz y empecé una sustitución por las tardes que acabó siendo a tiempo completo hasta el día de mi jubilación.

Pasados los años, veo claramente que fue cosa de “arriba”. Y hoy doy gracias por ese regalo.

2. ¿Te acuerdas de tu primer día como profesora?

No recuerdo exactamente el primer día, recuerdo la entrevista con Lolita en la pequeña salita de recepción, y aquella clase de Kinder tan acogedora y completa, con ropero, hilo musical y material Montessori… vamos, ¡impresionante! Y aquellas niñitas tan pequeñas y tan encantadoras.

3. ¿El día más feliz como docente en Guadalaviar?

El día más feliz… no recuerdo un día más feliz, recuerdo momentos muy felices… otros no tanto, pero en el recuento puedo decir que ha valido la pena.

Lo que sí te diré es que siempre hemos sido equipo, he tenido unas compañeras estupendas con las que he pasado muchos momentos felices, disfrutando de mil cosas pequeñas de la vida ordinaria, y participando de sus alegrías y emociones, noviazgos, bodas, nacimientos… Hoy seguimos siendo amigas y compartiendo preocupaciones y alegrías.

4. ¿La anécdota más divertida?

Son tantas… que no puedo seleccionar la más divertida. Te contaré que, después de comer, en la salita de profesoras teníamos preparado café y, cada cual pasaba cuando podía. Yo solía coincidir con Marisa Tortosa y Mª Jesús Palomo. Mª Jesús siempre tenía anécdotas que contar, pero, las ilustraba tanto, que alguna vez se perdía y decía: por qué decía esto… Entonces, Marisa se lo recordaba, porque como lo sabía y tenía y tiene una memoria extraordinaria, le decía: Mª Jesús, hablabas de… y ella cogía el hilo. ¡Nos hemos reído tanto!

5. ¿Alguna/s profesora/s que recuerdes con especial cariño en su paso por Guadalaviar?

Te contaré de algunas que ya nos ven desde el cielo: Teresa Calvo, que también estaba en las tertulias de mediodía; Marisa Roger, que si empiezo no terminaría; la buena de Mª Jesús Palomo; Consuelo… son muchas. Por supuesto, no te nombro a directoras ni compañeras jubiladas, con las que comparto grupo de whatsapp “Las Galácticas”, abierto a todas las que se vayan jubilando y en el que estamos al corriente de nuestras vidas y del cole.

6. ¿Con qué tres palabras describirías el colegio?

Padres, profesoras y alumnas.

7. Has visto pasar… ¿cuántas promociones?

Pues muchísimas… y he compartido celebraciones de salida del colegio, 25 aniversarios… Últimamente, por el paso del tiempo, vuelves a ver a las “niñas” convertidas en mujeres estupendas. Son encuentros entrañables y divertidos.

8. ¿Fue duro dejar de dar clase o por el contrario tenías ganas de otro tipo de vida?

He tenido la suerte de poder reducir la jornada cinco años antes de la jubilación definitiva. Eso te ayuda a ocuparte de padres mayores, como fue mi caso con mi madre, y a ir haciéndote a la idea poco a poco de la jubilación, de modo que, cuando llega, no es un cambio radical.

9. ¿Qué les dirías a las actuales profesoras del colegio?

Que aprovechen toda la formación que se sigue dando. Que no desesperen si los resultados no se ven pronto. Lo sembrado sale, antes o más tarde. Y mucha paciencia… Y, muy importante, que tienen un sagrario muy cerca, donde Jesús las espera y donde encontrarán fuerza, ilusión y ánimo.

Vicky, muchísimas gracias por tus palabras. Te queremos mucho. Un fuerte abrazo de tus queridas antiguas alumnas.